domingo, 10 de febrero de 2013

CONDICIONES MÍNIMAS



  • 330 días mínimo de gestación
  • Ubre desarrollada con pezones distendidos por calostro.
  • Ligamentos sacrociáticos relajados.
  • Cervix relajado o dilatado.

INDICACIONES CLÍNICAS



  • Partos prolongados por inercia uterina.
  • Yeguas que han parido anteriormente potrillos muertos o con hipóxia severa por  separación prematura de placenta.
  • Yeguas con traumatismos severos en partos anteriores (fístulas rectovaginales)
  • Yeguas con partos anteriores de potrillos con "Ictericia Hemolítica del recien nacido".
  • Ruptura del tendón prepubiano.
  • Enfermedades intratables.

INDUCCIÓN DEL PARTO


A pesar de que la inducción el parto es ya una práctica utilizada exitosamente por muchos veterinarios prácticos, tiene sus ventajas e inconvenientes. Se deben conocer sus limitaciones, seleccionar cuidadosamente los casos en los cuales se va a utilizar y controlar continuamente el parto hasta su finalización.

HIGIENE Y SANIDAD DEL PARTO


https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgs38ub5EBLlCuDmPwxEWJfIX4DWj2jRw6XcuZnwGKtjC5LYrGTv2UHyp85AJq2yRNpU0jMlvmcThsoeY2Eu2N2eU_jlxJ2fSfuG7B5AklG3ZQMFg90w-E_gk2Ow2Z-4lVTdwbYCewEf6jP/s1600/konie.jpgEl parto se produce en el 90% de los casos de noche, cuando la yegua se encuentra tranquila, su desarrollo es normalmente fácil y rápido y debe terminar con el nacimiento de un potrillo.
La Yegua debe disponer de agua a voluntad sobre todo después del parto.
Si el parto se desarrolla en un box o cuadra, este debe ser amplio (3x3 como mínimo), iluminado y aireado sin corrientes de aire, la cama limpia.
Si la yegua pare de pie, caso raro cuando no se la molesta, es necesario sostener el potrillo para impedir que se golpee contra el suelo y evitar que el cordón umbilical se rompa de forma rápida y brusca.
De forma lo más discreta posible se ha de verificar la presentación del potro (postura en que viene). Normalmente la presentación es anterior, con la cabeza apoyada sobre los miembros anteriores; la presentación posterior (de nalgas) se presenta algunas veces y entonces el parto será más largo y un poco más difícil. En casos raros se producen presentaciones anormales (distócias) en las que los potrillos se presentan atravesados, solo aparece un miembro, los miembros y no la cabeza,... En estos casos se debe avisar rápidamente al Veterinario siendo la necesidad de intervención muy urgente.
Después de la expulsión del potrillo la yegua se queda tumbada y tranquila recuperándose del enorme esfuerzo realizado durante el parto, es fundamental evitar molestarla para que no se levante y rompa el cordón umbilical, este debe seguir funcionando algunos minutos (hasta 15 minutos) y su ruptura ha de ser natural por tensión, bien porque la yegua se levante o bien por tracción al intentar moverse el potrillo.
La expulsión de la placenta ha de ser vigilada, se debe expulsar normalmente dentro de las dos horas posteriores al parto y en cualquier caso antes de las 5 o 6 horas. En caso contrario se avisará de urgencia al Veterinario. Las envolturas una vez eliminadas, se sacan de la cuadra y se extienden sobre el suelo para comprobar su integridad y que no han quedado restos en el útero.
En cualquier caso el Veterinario debe ser avisado rápidamente si la presentación nos parece anormal o si el parto se desarrolla muy lento o dificultoso.
Asistir al parto de una de sus yeguas es un privilegio de un criador o cuidador, es uno de los grandes momentos de la cría.

PREVISIÓN


No hay aún ningún método seguro para prever con exactitud el día y menos la hora del parto. Nos debemos guiar por:
  • La duración previsible de la Gestación, teniendo en cuenta las gestaciones anteriores de la yegua. En las primíparas podemos comenzar la vigilancia a partir de los 300 días.
  • Signos Fisiológicos precursores:
  • La indicación más segura de la proximidad del parto es el comienzo de la actividad de la ubre. Entre las 2 a 6 semanas que preceden, las mamas comienzan a desarrollarse; el examen frecuente por inspección o palpación suave nos permitirán comprobar una ubre en distensión máxima a las 24 a 48 horas previas al nacimiento. Los pezones están llenos generalmente de calostro y se observan las “velitas” o “perlas”, sin embargo las velitas pueden observarse hasta 4 días antes del parto, e incluso algunas hembras pueden secretar leche hasta una semana antes. Algunas yeguas primíparas pueden parir con un mínimo de desarrollo mamario y sin la presencia de “velitas”.
  • Durante los últimos días de la gestación los ligamentos sacrociáticos se relajan gradualmente hasta su borde posterior, desde la base de la cola hasta las tuberosidades de isquiáticas, se dice que la yegua está “partida”.
  • La vulva se relaja, alarga y agranda, está edematosa; estos signos son menos evidentes que en otras hembras domesticas, pero la inspección minuciosa nos hará reconocer estos cambios.
  • En los últimos momentos la yegua cambia su comportamiento, se aísla en el prado, está nerviosa, intranquila y agitada.
Estos signos son más o menos evidentes en función de las yeguas, algunos animales no presentan ninguno.

sábado, 9 de febrero de 2013

EL PARTO


El Parto constituye un proceso biológico destacado, que de transcurrir normalmente pone fin a la Gestación e inicia la existencia independiente del potrillo. El nacimiento debe acompañarse con un mínimo de traumatismo, de tal manera que la yegua sea capaz de concebir rápidamente de nuevo y producir otro potrillo sano al año siguiente.